¿Cómo medimos el éxito en la planificación de la riqueza familiar (mi término preferido al de «planificación de la herencia»)? Creo que la medida del éxito es cumplir los objetivos del cliente de una manera práctica, comprensible y rentable. Este es un proceso humano, que involucra primero a las personas y sus aspiraciones, opiniones y objetivos. Luego, dados los aspectos financieros de la planificación, consideramos la propiedad, su caracterización, el título, el flujo de ingresos y el potencial de apreciación. Por último, los objetivos de la mayoría de las familias incluyen la transmisión de la propiedad a los miembros de la familia de la generación más joven – y aquí nos encontramos cara a cara con los impuestos en sus diversas formas. El proceso que implica el cumplimiento de los objetivos familiares requiere la competencia del asesor, la comunicación y una preocupación real por nuestros clientes.
Durante casi 50 años he estado involucrado en el uso de entidades, a menudo entidades de paso, para la planificación eficiente de los patrimonios de los clientes – durante la vida y después de la muerte. La entidad debidamente constituida, financiada y operada puede separar la gestión y la propiedad del capital, puede desarrollar un formato para la donación y otras transferencias de participaciones en el capital dentro de una familia, y a menudo constituye una parte integral del plan general de sucesión de la familia.
El año 2010 fue un verdadero desafío para los planificadores y sus clientes, dada la derogación por un año del impuesto federal sobre el patrimonio y el GST (no el impuesto sobre donaciones, sin embargo). Entonces, a finales de diciembre de 2010, la Ley de Alivio Tributario de 2010 fue promulgada como ley en un apuro para evitar la revocación de los «cambios de impuestos de Bush» de 2001, efectiva el 1 de enero de 2011. Ahora estamos en el segundo año de la «ventana del mandato de planificación» de 2 años para la revisión, actualización y mejora de los planes de patrimonio de los clientes.
La planificación ahora, incluso con la nueva legislación de 2010 en vigor, parece necesaria, al menos para nuestros clientes con grandes patrimonios. La revisión de los testamentos y fideicomisos con cláusulas de bypass de fórmula y fideicomisos matrimoniales es necesaria, como mínimo. Además, dada la incertidumbre aquí, los clientes deben revisar y confirmar sus intenciones para la distribución de la herencia en caso de muerte – para asegurarse de que sus deseos se lleven a cabo.
Tenemos algo así como una «triple razón» para planificar ahora – bajo valor de los activos en esta economía recesiva, bajas tasas de interés (ejemplo: la tasa de AFR a medio plazo para octubre de 2011 – más de 3 y hasta e incluyendo préstamos a 9 años o ventas dentro de la familia – es 1,19%), y sin embargo los descuentos de valoración pueden estar en la legislación adversa pronto!
Para obtener más información sobre la planificación de la riqueza familiar del blogger invitado Owen Fiore, JD, vea su webcast gratuito a pedido, Family Estate and Succession Planning: 2012 and Beyond.