El ritmo de vida frenético, las horas que pasamos de pie, nuestros hábitos de vida, la obesidad, el sedentarismo… todo contribuye a que tengamos problemas de circulación en las piernas, con el tiempo, ya empezamos a ver varices, inchazón, dorlor, debilidad, etc.
Bajar de peso, empezar a hacer deporte moderado a diario, alimentarse bien, es la forma perfecta de mejorar la circulación de nuestras piernas, pero además algunas cosas sencillas, cambios en nuestra vida cotidiana sin apenas importancia pueden ayudarnos a relajarlas y a evitar en parte los síntomas que trae esta mala circulación, como el dolor, o las varices.

- Eleva las piernas para dormir: Coloca un cojín bajo tus pies o una madera entre el somier y el colchón, verás como por las mañanas después de unos días la hinchazón disminuye
- Evita las fuentes de calor, las estufas, vendas, una exposición en exceso al sol, la depilación con cera caliente, etc dilatan las venas y hacen que la sangre se acumule.
- Las duchas con agua fría o alternar el agua caliente con la fría (terminando con la fría) ayuda a despertarse y a estimular la circulación sanguínea corporal
- Lleva ropa y calzado adecuados utiliza prendas anchas, a poder ser de algodón para poder transpirar cunado puedas, e intenta no usar pantalones ajustados, cinturones o calcetines con gomas que te opriman, además el mejor calzado es el que tiene un tacón de 3 a 4 centímetros.
- Date masajes con aceites esenciales, dedícate un rato, así alivias la pesadez de las piernas y las varices, para hgacerlo bien haz movimientos ascendentes con las piernas en alto
- Bebe mucha agua sigue una dieta rica en fibra en vitamina B (cereales integrales, germen de trigo,…), vitamina C (cítricos, vegetales, hortalizas)y bioflavonoides (grosellas, uvas,…).