Probablemente los que tenemos contacto con personas mayores sabemos qué es la degeneración macular asociada a la edad (AMD), la causa más frecuente de ceguera en ancianos después de la diabetes, que se debe a un problema de la zona central de la retina que se conoce como mácula (señalada en la imagen de la derecha), por eso en principio en la degeneración macular asociada a la edad los ancianos ven el centro de las cosas borrosas, aunque la visión periférica no esté afectada.
Dos estudios recientes de Archives of Ophthalmology apuestan por ayudar a evitarla con una dieta adecuada:

El primero de ellos evaluó a 4.500 personas de entre 60 y 80 años. Se comparó la dieta de los que tenían o no degeneración macular y se comprobó las personas que no tenían la enfermedad consumían pescado en concreto un tipo de ácido graso omega-3 que se encuentra habitualmente en el salmón o el atún, más veces que la media.
El segundo estudio analizó a 7.700 personas a nivel nacional (hablamos de EEUU), el 11% de las personas tenían degeneración macular asociada a la edad. Se les dividió en 5 grupos teniendo en cuenta la cantidad de vitamina D que se encontraba en su sangre y se determinó que los del grupo con mayor concentración de esta vitamina tenían un 40% menos de tener AMD que los que estaban en el grupo con mayor concentración.
En ninguno de los estudios se habla de una cantidad exacta para poder evitar sus efectos, pero vamos, que ya sabemos que evitar las dos principales causas de ceguera en los mayores (diabetes y degeneración macular) es posible con una dieta sana.