Los contadores que trabajan con los guardianes financieros deben ser conscientes de los signos clave de que estos guardianes podrían estar abusando de sus clientes.
Según una reciente advertencia de la Asociación de Administradores de Valores de América del Norte (NASAA), los tutores suelen tener amplio acceso y control sobre los bienes de una persona que ya no puede administrar las finanzas por su cuenta.

Los tutores pueden ser figuras públicas financiadas por los gobiernos estatales o locales, tutores privados profesionales, miembros de la familia, vecinos, abogados, contables, asesores de inversión, productores de seguros u otros profesionales financieros.
Esta gente tiende a tener una amplia latitud. Nombrados por una orden judicial para ejercer alguna o toda la autoridad sobre una persona y/o patrimonio, pueden tomar decisiones relacionadas con la salud y la seguridad de sus pupilos.
Pero el abuso financiero entra en escena cuando el tutor utiliza indebidamente las cuentas financieras de la persona protegida.
Las siguientes son señales de alerta que deberían alertar a los contadores sobre posibles infracciones:
- Los guardianes usan su autoridad para transferir la propiedad para su propio beneficio.
- Reciben dinero de la persona protegida sin permiso del tribunal.
- Aprueban frecuentes retiros de efectivo de las cuentas de la persona protegida sin explicación.
- Los bienes se utilizan o se prestan para su propio beneficio sin la aprobación del tribunal.
- Hay mucho secreto sobre las finanzas de la persona protegida.
- Dependen de las finanzas de la persona protegida.
- Toman decisiones inexplicables que no son en el mejor interés de la persona protegida.
- La persona protegida se mantiene aislada.
Aparte de estas señales de advertencia, la persona protegida probablemente mostrará un comportamiento extraño. Por ejemplo, su apariencia e higiene pueden deteriorarse, y pueden exhibir un miedo inusual, ansiedad, sumisión o deferencia al guardián. También pueden depender completamente del tutor y estar socialmente aislados, y no saber nada sobre retiros de grandes cuentas, las decisiones financieras del tutor, o grandes préstamos o regalos hechos sin tener en cuenta la seguridad financiera.
¿Tienes una fuerte corazonada de que las cosas no están bien? La NASAA recomienda hablar con la policía, los Servicios de Protección de Adultos, los reguladores de servicios financieros u otras agencias gubernamentales con la autoridad para detener el abuso financiero de los guardianes.