Por el personal de AccountingWEB
Se está acabando el tiempo antes de que la tasa de impuestos de la nómina aumente automáticamente en dos semanas, y la disputa sobre cómo financiarla continúa.
La medida fiscal en cuestión mantendría la tasa de impuesto sobre la nómina en el 4,2% para el año 2012 en lugar de permitir que vuelva al 6,2% el 1 de enero. Es un recorte de impuestos que vale alrededor de 1.000 dólares para las familias que ganan 50.000 dólares al año. El proyecto de ley de impuestos sobre la nómina también renovaría los beneficios para los desempleados de larga duración y evitaría un recorte en los beneficios de Medicare para las personas mayores.
Esta mañana (19 de diciembre), la Associated Press informó que «Boehner habló después de un fin de semana caótico en el que los líderes del Senado primero no se pusieron de acuerdo sobre un proyecto de ley de un año completo, luego se unieron en torno a la extensión de dos meses que fue aprobada por la mayoría, sólo para provocar una revuelta entre los conservadores republicanos en la Cámara».
Aquí hay un resumen de lo que ha estado sucediendo:
Aunque la Cámara de Representantes, encabezada por el Partido Republicano, aprobó el 14 de diciembre un proyecto de ley que ampliaba la reducción de impuestos, la legislación se basaba en la congelación de los salarios y el aumento de las contribuciones a las pensiones de los empleados federales civiles. Además, aumentó las primas de Medicare para las personas mayores, y elevó una tarifa que se cobra a los bancos con hipotecas garantizadas por Fannie Mae y Freddie Mac. El proyecto de ley no tuvo los votos para ser aprobado por el Senado.
El viernes 16 de diciembre, los líderes del Senado llegaron a un acuerdo para aprobar una prórroga de dos meses en el recorte de impuestos sobre la nómina, manteniendo la tasa del 4,2 por ciento hasta febrero. El acuerdo requiere que la administración decida dentro de 60 días si el controvertido oleoducto de 1.700 millas de Keystone XL es en el mejor interés de la nación. Algunos grupos ecologistas se oponen al proyecto, pero varios sindicatos lo apoyan.
El líder republicano del Senado, Mitch McConnell, dijo que Keystone XL crearía unos 20.000 puestos de trabajo. Los críticos dicen que la cifra sería inferior a 3.500, incluyendo menos de 1.000 que serían permanentes.
El Presidente de la Cámara, John Boehner, dijo el viernes que su cámara no aprobará una extensión del recorte de impuestos de nómina sin incluir una disposición para forzar una decisión rápida sobre la construcción del oleoducto.
Obama preferiría posponer el controvertido asunto y amenazó con vetar cualquier proyecto de ley que obligue a tomar una decisión. Debido a que el proyecto cruza las fronteras internacionales, requiere la aprobación de la Casa Blanca. La administración se quejó de que los republicanos de la Cámara de Representantes están inyectando «cuestiones ideológicas en lo que debería ser un simple debate sobre el recorte de impuestos para la clase media».
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