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Cómo pueden prepararse los contadores para la era de la IA

La industria financiera se ha enfrentado muchas veces a cambios radicales en su pasado, desde el advenimiento de las tecnologías informáticas hasta el aumento del escrutinio reglamentario. Nada, sin embargo, ha sido capaz de sacudir la industria como la inteligencia artificial.

Los rápidos avances en la inteligencia artificial han dejado a muchos analistas de la industria prediciendo futuros escenarios nefastos en los que los contadores humanos han sido suplantados por robots y software. ¿Qué tan precisas son estas predicciones, y qué significa exactamente la Edad de la Inteligencia Artificial para los CPA?

Cómo pueden prepararse los contadores para la era de la IA
Cómo pueden prepararse los contadores para la era de la IA

Cada vez más contadores se esfuerzan por entender lo que el futuro les puede deparar. Afortunadamente, no necesitan entrar en el mundo del mañana sin estar preparados y sin saber lo que el futuro puede traer.

Los contadores que esperan sobrevivir y prosperar en la era de la inteligencia artificial deben comenzar por comprender las tecnologías que se avecinan. Aprender a probar el futuro de su carrera no será fácil, pero al tomar los pasos adecuados, un contador público puede aprender a explotar la automatización y el análisis de grandes datos, en lugar de temerlos.

Potencial de automatización

La primera cosa que un contador debe aceptar es el impresionante potencial de la automatización de las máquinas. Ya hay una gran cantidad de empresas de contabilidad que emplean sistemas centralizados que pueden hacer cálculos más eficientes que cualquier humano. A medida que los innovadores continúen haciendo grandes avances en el desarrollo de la IA, estos robots sólo se volverán más productivos.

Sin embargo, la automatización de la industria de la contabilidad no significa necesariamente su perdición. Basta con mirar la atención donde la automatización y la inteligencia artificial han sido una gran ayuda. Ha allanado el camino para un nuevo diagnóstico y tratamiento de las varices. Al automatizar una tarea repetitiva y simplista, las empresas de contabilidad pueden reducir seriamente los costos y liberar su capital humano para centrarse en cuestiones más complicadas. Los contadores del mañana no tendrán la tarea de recopilar datos, sino de interpretarlos para tomar decisiones más informadas.

El informe de Deloit de 2015 sobre la robótica señala que el aumento de la automatización es la segunda prioridad estratégica de las empresas. Aunque los robots llegarán a reemplazar a los humanos en la realización de tareas fácilmente programables y basadas en reglas, no obstante, lucharán por mantenerse al día con la creatividad humana. Los contadores tendrán que pensar más allá de la caja y trabajar más estrechamente con sus clientes en la formación de estrategias comerciales, si desean seguir siendo relevantes.

Preparándose para el futuro

Para evitar ser reemplazados por un software, los contadores deben alejarse del negocio de la compresión de datos y centrarse en su utilización para potenciar su pensamiento crítico y su capacidad de tomar decisiones empresariales. Intentar superar las máquinas será inútil; los contadores públicos certificados deberían, en cambio, potenciarse a sí mismos utilizando estas máquinas para comercializarse como innovadores ante sus clientes.

Los contadores deben, más que nunca antes, encontrar su nicho y sobresalir en él. La automatización no se centrará en una tarea específica, sino que gastará su energía en expandirse a sectores poco cualificados. Los expertos contables que construyen relaciones estrechas con sus clientes, y que sirven como algo más que calculadores humanos, son los que se harán a sí mismos irremplazables.

Mientras los CEOs se vuelcan a la automatización para reducir los costos, la primera tarea que buscarán automatizar son las más mundanas. La conciliación bancaria, el trabajo de los contables y la gestión de gastos pronto se completará con las computadoras, liberando a sus trabajadores humanos para centrarse en cuestiones más complejas.

Estudiando y dominando intensamente el aprendizaje de las máquinas y el análisis de datos, los CPA pueden llegar a poseer el conocimiento de los expertos en relación con las mismas máquinas que podrían reemplazarlos. Preséntese a sus clientes como alguien que entiende y domina el futuro, en lugar de como alguien que se arriesga a ser eliminado por él.

Los CPA deben tomar su futuro en sus propias manos, en lugar de esperar a que les sea impuesto por los robots. Definirse a sí mismo como un pensador innovador que entiende más que meros números es la forma de empezar a comercializarse como un contador del futuro. La interacción humana es, y siempre será, invaluable; dominarla es, por lo tanto, una forma segura de asegurarse de que no será reemplazada por una pieza de software.

Los inversionistas ya están enamorados de los empleados que utilizan los robots para ser más eficientes. Dos tercios de estos ricos inversores afirmaron que preferían organizaciones «híbridas» que utilizan lo mejor de ambos mundos. Tomando las medidas necesarias ahora para convertirse en un maestro de la IA, puede atender a esta élite demográfica en el futuro.

La inteligencia artificial no matará a los contadores, sino que revolucionará su funcionamiento. Al centrarse en su nicho, educarse en las próximas tecnologías y establecer relaciones humanas más estrechas, un contador inteligente puede seguir siendo relevante hasta un futuro desconocido.