Dado que las finanzas de una empresa son tal vez las más críticas, muchos posibles compradores recurrirán a un contador para que les ayude a evaluar la situación financiera de la empresa en cuestión.
Pero antes de comenzar el proceso de diligencia debida, los contadores deben comprender los fundamentos de la venta propuesta e informar al comprador de los recursos que necesitará para realizar una revisión adecuada.

Después de todo, la diligencia debida es la etapa más crítica en el proceso de venta de un negocio. Por su propia naturaleza, la diligencia debida está diseñada tanto para verificar la información como para buscar problemas. El proceso implica que los compradores revisen toda la información disponible relacionada con el negocio.
Aquí hay algunos consejos para los contadores para ayudar a navegar el proceso de diligencia debida financiera:
1. Presupone suficiente tiempo. A menudo, los vendedores y sus corredores presionan para cerrar una venta rápidamente; sin embargo, es importante no apresurar el proceso de diligencia debida. Los contadores deben aconsejar a sus clientes que no se conformen con menos tiempo del que cómodamente necesitan para completar una revisión exhaustiva del negocio. Si bien un examen financiero puede hacerse en varios días, dependiendo del tamaño de la empresa y otros aspectos del proceso de diligencia debida, los propietarios deben presupuestar entre dos semanas y un mes.
2. Solicite los documentos adecuados. Debido a que es probable que usted y el comprador estén trabajando en un plazo de tiempo programado, asegúrese de informar a su cliente de todos los materiales necesarios para completar la revisión financiera desde el principio. No inicie el proceso de revisión hasta que el vendedor haya proporcionado toda la información solicitada. Los documentos a revisar incluyen el beneficio del propietario (SDE), los estados financieros auditados de tres años, el análisis de los márgenes brutos, las cuentas por cobrar, las cuentas por pagar, las declaraciones de impuestos de los últimos tres años y el informe de crédito de la empresa (si está disponible).
También es conveniente examinar los informes operacionales, como el calendario de inventarios, un análisis de los gastos fijos y variables, un examen de todas las deudas y pasivos contingentes, un examen de las obligaciones legales o de seguros, y el contrato de arrendamiento financiero. Busque cualquier cambio o posible cambio en los productos, servicios o proveedores que pueda ser positivo o negativo para las finanzas de la empresa. A partir de ahí, el contador puede realizar un análisis financiero independiente de la empresa.
Durante este período, el contador debe comparar cómo se comparan los ratios financieros clave con los promedios industriales y regionales, las tendencias a lo largo del tiempo, y luego crear una proyección de la cuenta de resultados de la empresa para los dos años siguientes. También puede ser conveniente hablar con el contador del vendedor para hacer cualquier pregunta o indagar sobre cualquier asunto que pueda ver.
3. Revisa los planes de negocio del propietario. El plan de negocios más reciente, así como cualquier versión anterior, debe estar entre los documentos solicitados y ser revisado cuidadosamente. Es importante comparar estos planes con el rendimiento y las actividades reales de la empresa, y ver si el equipo directivo es capaz de poner en práctica sus propios planes. Después de todo, hay que asegurarse de que esta empresa, con una buena gestión continuada, cumpla las expectativas del comprador. En esencia, usted está tratando de ayudar al cliente a responder a la pregunta, «Si compro este negocio, ¿cuánto puedo ganar?» Sin embargo, la respuesta a esa pregunta comienza con, «¿Cuánto está ganando el vendedor ahora?»
4. Llegar al fondo de cualquier bandera roja. Aunque muchos documentos financieros hablan por sí mismos, es importante que los contables indaguen en algunas prácticas financieras clave. Por ejemplo, ¿la empresa está cobrando sus cuentas por cobrar de manera oportuna? ¿Paga la empresa sus deudas a tiempo? ¿Cuánta deuda incobrable está cancelando la empresa cada año? ¿Tiene la empresa alguna deuda pendiente?
Es tu trabajo encontrar esas banderas rojas y llevarlas a la atención del comprador. Aunque no todos estos temas pueden ser asesinos de tratos, pueden dar al comprador una ventaja durante el proceso de negociación.
Pensamientos finales
Después de completar el proceso de diligencia debida, es necesario hacer una evaluación sobre la situación de la empresa, la capacidad financiera y las áreas de la venta que deben negociarse para formar un acuerdo más aceptable para ambas partes. Si en algún momento usted cree, basándose en la documentación que el vendedor ha proporcionado o en la información que éste ha comunicado, que la venta es indeseable, esté preparado para asesorar a su cliente en consecuencia.
Mientras que la decisión final de comprar o no depende del cliente, contarán con tu honesta evaluación y orientación.